El sueño del bebé
El sueño siempre causa inquietud y preocupación en los papás primerizos. Es normal que el bebé tarde unos meses en dormir toda la noche y que reclame la atención de la mamá tal como si fuera de día.
La razón es que, como el bebé ha estado nueve meses en la oscuridad total de la panza, no distingue cuando es de día y cuando de noche. El ambiente en el mundo exterior es muy diferente y necesita tiempo para acostumbrarse a él.
Para ayudarlo a familiarizarse con la realidad de su entorno, conviene ofrecerle actividades que sean de su interés y procurar que no duerme tanto durante el día. Claro que siempre es fundamental respetar sus tiempos y, por lo tanto, no hay que obligarlo a estar despierto si quiere dormir, porque si se molesta y sobreexita es posible que tenga dificultades para conciliar el sueño por la noche.
Buenos hábitos
– Durante el día, que duerma con la luz y los ruidos del ambiente.
– A la noche, que su habitación este silenciosa y en penumbras.
– Acostarlo en su moisés antes de que esté totalmente dormido así no le resulta desconocido el lugar si se despierta a la noche.
– Si se queja o llora, sin levantarlo, cantarle una canción, mecerlo u ofrecerle el chupete.
– No cambiarlo, en lo posible, durante la noche.